lunes, 1 de abril de 2013

Te esperaré


 

Nunca más cruzados brazos
Cana, negra, blanca o fea.
Te buscaré dónde te vea,
Como amor en mi regazo.

Te esperaré.
Sanaré la herida junto a la mía.
Te ansiaré, cual mañana busca un ocaso
Como amor vejado, hecho pedazos
En lo que diste a otro, y no fue mío…

Te desearé,
Como la noche suspira otra luna,
Como sueños, en desnudos lazos,
Como amor, fresco y sin rechazo,
Ávido de ti: Mi pecho te ansía.

Mis brazos tibios, te declaman
Buscando tonos de alegría;
Te honraré, como los que aman,
Hasta ese minuto, y último día.

Te buscaré,
Como quien larga la espera;
En hallar todo, de la nada;
¡Cómo quiero que me quieras!
y que seas tú, mi amada.

Te esperaré, antes del fin de mis días.
Te buscaré como la noche a sus mañanas.
Cada minuto, que permitas,
Para que sepas quien te ama (si tienes ganas).

Aunque tu mundo yazga en pedazos,
Te buscaré y no estoy vacío...
Si tu amor se ha roto en retazos,
Sana conmigo, sin desvaríos.

Te esperaré
Te aguardaré
Marchemos juntos a otra vida:
Si hay amor, siempre hay salida.

Te esperaré y te buscaré…
Amar siempre fue mi decisión.
Sí he fallado (y me han fallado)
No hace mella a mi ilusión.

Te buscaré, te esperaré:
Amar es mi decisión.
Y, si el pasado me quitó vida,
Quizá mañana halla emoción.

Te deseo en la dicha y la desdicha.
Así vivas el todo, sin apostar nada.
¿Qué sería de uno el hombre?
Si cada uno no viere a Amada.

Parezcan los sueños rotos,
¡Eso no es vida! Ni era nada.
Te espero en la desdicha,
Cuando estés desilusionada.

Y, quizá, más allá,
Más lejos que esta aurora,
Se comprenda al decidir,
Que el amarse no se  implora.

Soñar no cuesta nada,
Y el amar lo pide todo.
¿Seré yo a quién tú ansiabas?
Y sin querer, viví a mi modo.

Te buscaré, te esperaré,
Tras los colores de la vida.
Te llamaré, te soñaré;
Y que se sanen las heridas.

¡Te esperaré!
Como busca el agua la tierra seca.
¡Te buscaré!
¡Te esperaré!

Como el río fluye al mar.
Como la arena rueda a su orilla
Como el cielo sostiene a las aves
Como la vida clama más vida.

Que tu dios no sea pagano,
Para que mi sueño no sea en vano.
Te esperaré
Te soñaré…

Como al rocío de cada día
Que viste a las mañanas;
Como el amor -en juventud-
Que va de a poco, a las entrañas.

Te desearé como la noche,
Desnudo, ya sin nada;
Amor fresco en tu regazo,
Ávido, de la deseada.

Y al final de mis días,
Te esperaré si tienes ganas;
Cada minuto, que permitas,
Para que sepas quien te ama.

A.T.             Octubre 2012 y Marzo 2013